decorosa en su semblante
casi esquiva en su mirar
todo por ella pasaba
nada dejaba escapar.
de voz limpia, altiva al caminar
su cariño se palpaba..no se podía tocar
recta,sobría a la hora de zalamear
morena de piel, con su bata perfecta
y sus mangotes perfectamente arremangaos
sentada en su sillon de mimbre
hacía gala de su saber estar.
con decoro procuró
no hablar ni estar en boca de nadie
una dama manchega.
que ya ves si conocía
que de joven decidió
que el día que muriera
su rostro no fuera espejo
de mentiras o verdades.
y un fino lienzo tapara
la mascara del más alla.
para esa hermosa dama manchega, que un día decidió marchar.