En el bastidor de mi vida bordaré tu nombre con perlas finas. Con hilos vivos de mil colores, del arco iris recogeré. Cuando me asome a tus espejos bordaré tu nombre para el silencio en las esquinas de mi pañuelo. La ilusión enhebraré con hilos siempre de fantasía, como soñadora Dulcinea que busca a su hidalgo Don Quijote. Bordaré tu nombre con notas claras de sinfonía, en los pasillos largos de la esperanza donde la incertidumbre se hace interminable. En el blanco lienzo de tu sonrisa.
EJC
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Z
zinnia_8260177
8/11/09 a las 19:13
Una bella metáfora en su conjunto. Delicado, romántico y muy sentimental. "En el bastidor de mi vida, bordaré tu nombre con perlas finas", me ha encantado, es preciosa esta metáfora.
