No se cómo acudir a tu encuentro ya que no logro divisar tu silueta.
Hace apenas un momento te encontraba frente a mí ,
mis pupilas reflejaban tu rostro traspasando mi alma.
Pero simplemente te fuiste convirtiendo en un recuerdo borroso, que poco a poco se escapaba de mis memorias; dolías, dolías tanto a medida que te diluías por entre esta oscuridad en la que ahora habito, te me escurres pon entre mis dedos, como los deseos de besarte y hacerte una vez mas mía!
Me envuelve esta cárcel de madera, pero aun así soy tan libre que no puedo tocarte.
Que helado se está convirtiendo el tiempo, que triste es ahora mi nuevo cielo, tengo manos pero no logro tocarte, ojos pero no logro mirarte, es tan simple como tan complicado.
Te amo, pero te odio ya que entre sombras te sigo esperando