Mi querido diario:
Te escribo siempre entre tu silencio y el mío, desnudando el alma sobre tus páginas blancas, que van atrapando y envolviendo, sentimientos que fluyen desde lo más profundo, para depositarlos con tinta...sobre tu boca callada.
Tal vez espero que un día ,esa boca se abra y acaricie mis letras, con la misma claridad que reflejan tus hojas, donde tantas veces busco mi espacio, para entregarte... mis inquietudes... lágrimas, risas, deseos e ilusiones, en definitiva... un mundo interior , que solo tú conoces muy bien, por haberme dejado la llave de tu casa, para poder exponerme, tanto en los buenos ... como en los malos momentos.
¡Oh mi querido diario! ...si supieras cuantas veces... me encuentro entre el tumulto bullicioso y busco el momento, de quedarme a solas contigo, o cuento las horas que faltan, para cobijarme en mi soledad buscada, y contarte cada cosa que he pensado... a lo largo del día, buscando refugio, entre tus brazos dormidos, a quienes voy dando movimiento y soltura, con cada pensamiento... que dejo caer sobre ellos.
Si supieras lo bien que me siento... mientras te hablo, aún sabiendo... que no me dirás nada. Se que de alguna forma, me das respuesta a muchas cosas, y es que hay algo entre tú y yo, además del silencio... que me anima a escribirte cada día, quizás algún nombre, que a veces, encuentro perdido, entre tus páginas, y muy discretamente... dan un soplo de aire fresco a mis dudas. Tal vez... es la señal, que me haces , para decirme tantas cosas, que solo yo puedo entender... al abrir tu puerta cada día.
A veces ... solo quiero estar a solas contigo, llenar cada parte de ti... de letras que se deslizan entre susurros, para darte todo lo que hay en mi, esa parte tan buscada y tan valiosa, cuando quieres conocer a alguien ... que aunque permanece en la oscuridad, deseas que sea siempre como el cristal.
Sí... mi querido diario... eres tú...a quien desde hace tiempo, dedico un trozo de mi vida, pero sobre todo y lo más importante... es que necesito buscarte, para ser yo... en cada palabra que te entrego.
Susana.
