Te vi por primera vez el verano del 1993, solo, sin fuerzas, abandonado, en este momento, no dude en adoptarte, pero llego el día de decirrnos adiós mi niño, sabemos que tenemos que despedirnos de los seres que queremos, pero fue muy doloroso verte partir el 5 de abril fue el día en que tuviste que irte, 16 años que me regalaste de tu compañía, conocerte y tenerte conmigo, recibir tu cariño, tus ojitos me robaron el corazón desde que te vi por primera vez, y hace un mes tuve que cerrarlos por ultima vez, camino de la clinica iba pensando si aquello era justo...no sé, yo iba a quitarte la vida, tu vida, algo que sólo te pertenecía a ti, tus ojos me miraban y, te juro, que entendí tus pensamientos ayúdame, haz que no sufra mas...", me gustaría saber que no te importo que te durmiera, que me perdonas. Te di las gracias por haber estado en mi vida, por enseñarme a ser paciente, a responsabilizarme de ti, por todas las risas que me provocaste, por dormir conmigo y por quererme siempre aun cuando estuviera de mal humor. Me diste amor, ternura y el llanto me ahoga, me parte el alma saber que te has marchado. Será difícil no verte en casa al llegar y el silencio que ha ocupado tu lugar. Dejaste mucho mi Nano, recuerdos que ahora guardo en mi corazón y que dejare por siempre ahí guardados. Quizá me aferro a tener algo físico de ti: tus mantitas, tus abriguitos, tus juguetes que incansablemente llevaste a mis manos cuando es la hora de sacarte a pasear ¿a quien paseare? y cuando veo a las personas paseando a sus perritos no se me parte el corazón. Me despido de ti chiquitin, con mucho dolor. De nada me sirve llorar amargamente, de nada me sirve pensar en todos nuestros ratos juntos, de nada me sirve gritar, patalear... tú ya no estás. No es posible olvidarte, a pesar de ser tan pequeño tenias el alma tan grande, te recordaré siempre, en algún momento sin tanto sufrimiento, llegará el día que al pensar en ti, mi rostro se ilumine de alegría.
Adiós mi niño siempre estarás en mi pensamiento y corazón.