Foro / Ocio

Una blognovela

Última respuesta: 19 de abril de 2012 a las 19:42
A
aidi_5376873
19/4/12 a las 19:41

Hola a todos y todas. Soy nuevo por aquí y quería empezar en el foro haciendo una recomendación de una blognovela que está escribiendo un amigo. Es un poco surrealista, pero a mí me parece divertida. A la gente, por los comentarios, también parece que le está gustando. La dirección es esta: http://recuerdosdeunaltaxeso.wordpres s.com y os dejo el primer capítulo. Ya me diréis que os parece:

1-. "Que me duelan los huevos

El día que Melisa y yo llegamos a la tierra no sabíamos lo complejo que era el mundo éste. Si alguien nos los hubiese avisado, no habríamos venido, pero en Altax todo el mundo se calló la boca, no dijo nadie ni mu y al final acabamos más perdidos que Doroteo en un centro de adelgazamiento. Doroteo es un primo mío que tiene tendencia al sobrepeso y que aguanta mal las bromas relacionadas con su volumen. Pero supongo, amigo lector, que no te estarás enterando de nada, así que tendré que comenzar esta historia, que es al fin y al cabo la mía, por el principio, y supongo que eso conlleva hacer una afirmación dura: Melisa y yo somos extraterrestres. Ya está, ya lo he soltado. Sí, ya sé que suena un poco raro, pero es lo que hay. Aunque, a decir verdad, después de tanto tiempo en la tierra yo me considero ya más terrícola que muchos de los de aquí. Ahora viene alguien y me dice que tengo que irme de vuelta a Altax y a mí me da un tabardillo de tal magnitud que se me lleva al otro mundo. Melisa y yo procedemos de un planeta que, como habrás imaginado si eres algo avispado, se llama Altax y está lo suficientemente lejos para que allí desconozcan todo lo que hacemos aquí. A Melisa y a mí nos reclutaron de entre cientos de miles de Altaxesos para mandarnos a la tierra. Y, llegados a este punto, querido lector, tengo que comenzar por desmitificar a los extraterrestres: no fuimos duramente preparados ni elegidos después de superar pruebas físicas y psicológicas límite. Qué va. A mí el viaje a la tierra me tocó gracias a los gebreta, que se podría decir que son los equivalentes a los yogures de la tierra. Como me gustan los gebreta más que a un tonto un lápiz, reuní tantos envases que los mandé a un concurso. Vete lejos y no vuelvas, decía en las bases. Y debe de ser que yo fui el que más gebretas mandé, porque a la vista está que me mandaron lejos y no volví. Como el viaje era para dos personas, convencí a Melisa para que se viniera conmigo. Y aquí estamos desde hace unos cuantos años ya y tan a gusto, oiga.

La verdad es que ahora digo que estoy a gusto, pero el viaje y la llegada no fueron moco de pavo. Antes de meternos en la nave espacial nos preguntaron qué edad queríamos tener en la tierra. Yo, como soy muy precavido, indagué:

-¿Y cuánto viven en la tierra?. Me dijeron que cerca de 100 años, una décima parte de la vida de un Altaxeso, aproximadamente.

-¿A qué edad empiezan a defenderse por sí solos allá abajo?, seguí preguntando.

-A los 15 más que de sobra, pero le advierto que los 15 son una edad difícil, me dijeron.

-¿Por qué?

- Porque te salen granos en la cara, pelos en los sobacos y te duelen los huevos, me dijeron.

Vamos a ser sinceros, yo no entendí nada de lo que quería decir aquello, pero me asustó mucho.

-¿Y cuándo paran de dolerte los huevos?

El hombre que me atendía, el mayor especialista de terrícolas de todo Altax, puso una cara muy extraña y al final me dijo:

-Según nuestros estudios, los hombres sufren dolor de huevos en casi todas las etapas de su vida desde los 12 o 13 años.

A mí aquello me descolocó. No había ni iniciado mi aventura y ya sabía que iba a convivir con el dolor de huevos fuera lo que fuera ese menester- para siempre.

-Oiga, ¿y no hay manera de no ser hombre?, inquirí.

El señor aquel me miró como si le hubiese dicho que Doroteo se había puesto a dieta, pero al final logró reaccionar:

-En la tierra, o eres hombre o eres mujer. Si eres hombre te duelen los huevos, si eres mujer, menstruas.

Atónito como estaba, yo seguí a mi rollo:

-Oiga, y qué es mejor, ¿el dolor de huevos o el menstruar?.

El señor aquel yo creo que ya se estaba poniendo nervioso.

-Depende lo que prefiera, me dijo.

Como aquella respuesta no me servía de mucho, seguí a lo mío:

-Perdone la curiosidad, pero ¿en qué consiste exactamente eso de menstruar?

El hombre se movía ya de un lado para otro al borde de la muerte.

-Menstruar es que una vez al mes te tocan unos cuantos días en los que sangras, que suelen coincidir con un periodo de gran dolor de huevos de los hombres.

Yo pensé un segundo y al rato dije:

-¿Me está usted diciendo que tengo que elegir entre que me duelan los huevos o sangrar una vez al mes? El especialista me miró y asintió, así que yo, que desconocía qué eran los huevos y el sangrar, me la jugué:

- Pues que me duelan los huevos.

- Entonces usted será hombre y su compañera mujer. ¿Qué edad quieren tener?, me dijo el señor.

- Oiga, ¿a los 18 años duelen más los huevos que a los 15 o menos?, dije yo.

- Según los estudios, lo normal es que algo menos, me dijo el especialista.

- Pues que sean 18, repliqué.

Y así es como decidí que llegaría a la tierra hecho hombre y con 18 años. Fue solo el principio de mi larga lista de decisiones equivocadas.

Ver también

A
aidi_5376873
19/4/12 a las 19:42

Error
Os dejo el enlace, que está mal puesto arriba: http://recuerdosdeunaltaxeso.wordpres s.com

ISDIN Si-Nails

ISDIN Si-Nails

Compartir
Videos, noticias, concursos y ¡muchas sorpresas!
facebook