¡Hola, amig@s del foro!
En esta ocasión, y contrariamente a lo que es habitual en mi, no os voy a obsequiar con el producto de alguno de mis robos de versos (ladrón e versos, eso es lo que soy!), sino que me gustaria compartir con vosotr@s algo realmente mío, y que espero que os guste, al menos un poquito...
No sé si os habreis fijado, pero hay algunas frutas, generalmente exóticas, que parece que existan sólo para fastidiarnos la existencia, porque tienen sabores que parecen pensados para recordarnos que igual es políticamente incorrecto pasarselo demasiado bien, con los tiempos que corren. Por eso las llamo “frutas de mal rollo”. Una advertencia: posiblemente a l@s amig@s que me lean desde paises caribeños, este texto les parezca una solemne tontería (y a quien me lea desde aquí posiblemente también...), pues estas frutas son habituales en sus paíese, pero aquí son bastante exóticas. Me refiero, por ejemplo, a frutas como el maracuyá, mal llamada “fruta de la pasión”, pues no hay nada menos apasionante que el sabor de dicha fruta. ¿Quién no ha probado alguna vez uno de esos zumos de varias frutas, entre las cuales se encuentra el maracuyá? ¿A que todo va bien, hasta que tropezamos con esta frutita, al final del trago, como diciendo... “¡hola! Soy el maracuyá, y estoy aquí para dar mal rollo, no te fueras a creer que este zumo es tan dulzón y sabroso como parece”,y, ciertamente, el sabor amargo y rasposo que queda al final del zumo es de los que no se olvidan. Y otro tanto podríamos decir de otra fruta que parece un caballo de troya, la conocida como “aranja”, que algunos fabricantes de zumos,que parece que tienen algún tipo de resentimiento contra la raza humana, mezclan, como quien no quiere la cosa, con el inocente y cotidiano zumo de naranja. La aranja es un cítrico de sabor bastante amargo y ácido, contar a el cual nuestra entrañable naranja, reina y señora de nuestra huerta, no puede hacer nada, y nosotros, incautos consumidores de estos zumos, nos la tropezamos, y nos obsequia con otro viaje al mundo de los sabores, digamos “alternativos”...
Pero para fruta “de mal rollo”, la peligrosamente desconocida “naranja rosa”. MUCHO CUIDADO CON ELLA.... Tras un aspecto francamente apetitoso, atractivo, se esconde una fruta que, en nivel de acidez, hace que el pomelo verde parezca un caramelo de fresa... Se comercializa en forma de zumo (la naranja rosa), sin ningún tipo de advertencia que ponga a los posibles consumidores, desconocedores del peligro que les acecha, al corriente de lo que hay dentro de la botella...
Y aquí acabo. Mi intención eera compartir con tod@s vosotr@s el producto de un encuentro casual entre un anuncio de zumos de frutas y un momento casual de inspiración. Si os he divertido, o al menos os he hecho sonreir, me hareis muy feliz... Y si os ha parecido una solemne tontada, pues lo siento mucho...
